Solución eficaz para mejorar tu estrés...

En esta entrada deseo dejarte unas breves recomendaciones que te ayudarán a gestionar ese estrés que ha podido desbordarse y que te está siendo dificultoso gestionar...

1.- APRENDE A DELEGAR. Confía en los demás, evalúa la cualificación y capacidad en tu entorno para realizar ciertas tareas que a día de hoy sigues asumiendo sólo tú, en muchas ocasiones por puro hábito, hazlo poco a poco y quédate con las actividades no transferibles. Al principio no será sencillo, pero si eres constante obtendrás resultado y liberarás tiempo para dedicar a otras cosas que también son importantes para tí.

2.- APRENDE A DECIR NO. No es una expresión que tememos pronunciar por el hecho de ser enjuiciados por los demás, tememos parecer poco responsables, comprometidos, trabajadores o interesados si se nos ocurre decir NO. Valora cada propuesta en las que tengas que adoptar una decisión importante, ya sea en el ámbito personal como en el personal en términos de : ¿Me interesa... ? ¿Cuales son las ventajas o desventajas...? ¿Cómo afecta esta decisión a mi día a día...? y sobretodo evita tomar una decisión que no se ajusta a tu deseo por el simple hecho de que lo que el otro puede pensar de ti.

3.- AGENDA TU TIEMPO. Compra una agenda y divídela en cuatro categorías. "URGENTES" "IMPORTANTES" "RECOMENDABLES" "PRESCINDIBLES". Dedicar diez o quince minutos a primera hora del día, o última de la noche anterior a agendar tus actividades te ahorrará mucho tiempo, créeme.... EL PLAN ES PARA SEGUIRLO; SIGUE TU PLAN, porque de nada sirve organizarte si luego no te ciñes a él. También es importante que guardes media hora para posibles imprevistos, esto hará que ante una eventualidad no se disparen todos tus circuitos de alerta... recuerda que planificar te ahorra tiempo. Por otro lado, contar con al menos una hora de tiempo para dedicarte, hará que la calidad de tu vida mejore. Piensa en todas las cosas que pueden hacerse en ese tiempo... jugar con tus hijos, dar una paseo, leer, ver una serie, preparar una comida que te apetece comer, practicar meditación, etc.

4.- ECHALE UNA MIRADA A TU HORARIO. Los seres humanos no estamos programados para trabajar durante 10 horas al día o más... y si continuamos machacona e insistentemente en esto, nuestro cuerpo y nuestra mente terminarán pasándonos la factura correspondiente. Ojo, claro está que hay momentos en nuestra vida que requieren un esfuerzo adicional, pero se trata de eso; una excepción, no la norma que guíe lo cotidiano. Considera qué cambios puedes hacer en tu horario que te ayuden en tu productividad, sin tener por ello que dedicar más de diez horas al día.

En definitiva, seguir estas cuatro recomendaciones no es garantía de que tu estrés del día a día vaya a desaparecer, cosa que tampoco es recomendable, pero lo que sí es seguro es que te ayudará en la mejora de tu calidad de vida.